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Proluna o PLN, significa Progresión Lunar Natural, la que es una progresión simbólica que considera que el ciclo humano se compone de doce edades de 7 años. Ese ciclo comienza con el nacimiento de una persona, simbolizado por el Ascendente y sigue por las sucesivas cúspides de casas que indicanedades septenales posteriores.
La considero LUNAR porque el ciclo septenal está ligado a las fases lunares y por consiguiente a la semana, base unitaria de nuestro calendario. Por otra parte, el planeta Urano que simboliza a la Astrología misma, cumple un ciclo coincidente de 84 años en rodear al sol, es decir que tarda siete años en recorrer cada signo zodiacal. Si consideramos todo bajo una lupa analógica, el binomio Urano-Luna que inspira a la PROLUNA, significan: el astrólogo y sus consultantes, lo que refuerza mi creencia en las buenas raíces de este método. Por descarte, ninguno de los otros ciclos planetarios se acerca siquiera al promedio de vida humana: Saturno, que es el planeta inmediato anterior, tiene un ciclo de 30 años, y Neptuno , el planeta inmediato superior, tiene un ciclo de 163 años.
Entre Urano que rige el ciclo humano y la Luna que rige la semana y el mes, preferí usar a ésta última por su mayor incidencia en la vida cotidiana.
La considero Natural porque es la más sencilla de las progresiones conocidas, ya que no necesita efemérides ni cálculos, pero además, porque es más natural que una progresión astrológica sea simbólica, como la Astrología misma, y no realista y exacta como pretenden los tránsitos, progresiones primaria, secundaria y terciaria, direcciones, etc. Estas últimas se parecen demasiado al materialismo cartesiano, que en el conocimiento humano deja mucho que desear, y por ello, dentro del integralismo astrológico, lo que más se le parece por su base simbólica, es la PLN.
Este planteamiento de lo general a lo particular, dogmatizando de primera sobre el ciclo promedial de vida, es de suma importancia, y si está equivocado todo el sistema sería falso. Pero para asegurarse, el lector tendrá las pruebas suficientes al terminar este tratado, donde lo que se impone desde arriba prueba luego su valor y demuestra que no sólo por la razón se llega a la verdad, sino por una integración con el instinto, la intuición y la extuición.
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